ADVERTENCIA: Los expertos estiman que el número total de casos de fraude se encuentra entre los 300 y los 700. Los casos de fraude deportivo presentados aquí no son, por lo tanto, exhaustivos.
Los casos de fraude aquí mostrados pretenden ser la representación, para cada continente, de hechos o sospechas de manipulación deportiva que están ligados a apuestas deportivas.
El New York Times ha revelado que, según la FIFA, se manipuló el resultado de entre 5 y 15 partidos de preparación del Mundial 2010 en Sudáfrica. Entre ellos, el partido Nigeria/Argentina y Sudáfrica/Guatemala en el que el primero ganó 5-0 y por el que el árbitro se habría embolsado 100.000 dólares.
Hansie Cronje, capitán del equipo sudafricano de cricket, recibió dinero por parte de un sindicato indio de apuestas clandestinas por corromper a sus compañeros para ser derrotados en diversos encuentros. Este caso llevó a la Federación internacional de cricket a crear una unidad anticorrupción con poder real de investigación (ICC’s Anti-corruption and Security Unit (ACSU)).
El singapurense Tan Seet Eng, también conocido como Dan Tan, es sospechoso de estar al frente de una red mafiosa asiática que habría manipulado decenas de partidos de futbol en Italia (Calcioscommesse).
Tan es un conocido magnate del crimen organizado en la región y se vale de plataformas ilegales de apuestas en Taiwán, China o Malasia. Es conocido por la organización de partidos fantasma – sobre todo en Bahreïn-Togo, que presenta como oficiales y pone en escena a una selección togolesa formada por jugadores amateur – y, sobre todo, por la manipulación del resultado de los encuentros.
Para lograr el resultado deseado, Tan se apoya en un sistema rico en intermediarios. Muchos son originarios de Europa del Este o de los Balcanes – o de Italia con relación directa con la Camorra. El rol de los intermediarios está perfectamente definido: realizar el “estudio de mercado” que permitirá definir el importe de los sobornos, el envío de dinero, etc.
En diciembre del 2013, la policía de Singapur hizo público el arresto de 14 personas sospechosas de formar parte de la organización mafiosa. Dan Tan, quién ya estaba perseguido por la organización de decenas de fraudes deportivos en otros países de Europa, estaba entre ellos.
Eric Ding, hombre de negocios singapurense, fue condenado en julio del 2014 en Singapur a 3 años de prisión por el soborno de 3 árbitros libaneses para la manipulación del resultado de partidos de futbol a cambio de servicios de prostitución.
« El objetivo era incitar a los árbitros a tomar decisiones erróneas en el campo, de lo que se aprovecharía los organizadores de la manipulación », ha declarado el presidente del tribunal de Singapur, quien también señaló que actos como éste contribuyen a mantener la reputación de Singapur como país del fraude deportivo.
Los 3 árbitros libaneses fueron arrestados en abril del 2013, antes de que pudiesen arbitrar un partido de la Copa de Confederaciones asiática entre el club singapurense Tampines Rovers y la formación india Bengale Oriental. El árbitro principal fue condenado a 6 meses de prisión y sus dos asistentes a 3 meses.
Nikolaï Davydenko es sospechoso de haber perdido de manera voluntaria un encuentro durante el torneo de Sopot (Polonia), en el que se apostaron sumas anormalmente elevadas y que llevaron al operador de apuestas Betfair a anular las ganancias (cerca de 7 millones de euros). Como consecuencia de las sospechas, jamás confirmadas, varios tenistas han reconocido haber recibido ofertas para manipular sus encuentros. La Federación Internacional de tenis ha puesto en marcha la “Tennis Integrity Unit”, con capacidad de investigación y sanción.
3 jugadores paquistanís de cricket junto con su agente fueron condenados en noviembre de 2011, por un tribunal de Londres, a dos penas de prisión por corrupción en el marco de la manipulación de partidos. La trama fue revelada por el periódico News of the World, que habría recurrido al uso de la cámara oculta.
Los jugadores Salman Butt, Mohammad Asif y Mohammad Aamer fueron condenados por el tribunal a 2 años, 1 año y 6 meses de prisión respectivamente por conspiración para obtener dinero y engaño. El agente, Mazhar Majeed, recibió la pena más fuerte, siendo condenado a 2 años y 8 meses de prisión. Los condenados deben cumplir la mitad de la pena antes de poder pasar en libertad condicional.
El tribunal considera el crimen de los tres jugadores especialmente grave al haber sido considerados como “héroes” en su país, donde el cricket es extremadamente popular. Los tres jugadores fueron acusados de haber manipulado de manera voluntaria, a cambio de un soborno, varias de las fases de un partido internacional entre Inglaterra y Pakistán en agosto de 2010 en Londres, con el fin de favorecer de manera ilegal a los jugadores de apuestas.
Primo Carnera, boxeador italiano y campeón del mundo de pesos pesados en 1933, manipuló el resultado, a menudo bajo órdenes de la mafia, de varios de los combates en los que participó durante los años 30.
Múltiples jugadores y equipos, entre los que se encuentra el Milan AC y el Lazio, han apostado de manera regular y han perdido voluntariamente diversos encuentros para aumentar sus ganancias. Varios jugadores han sido expulsados o enviados a prisión, como es el caso de Paulo Rossi (delantero internacional italiano y ganador de la Copa del Mundo 1982 y del Balón de Oro 1982), condenado a dos años de suspensión por haber manipulado el resultado de un partido.
« Calcioscommesse », que se traduce como « Apuestas de futbol » y es el nombre que la prensa italiana ha dado al caso de fraude deportivo en los campeonatos italianos de futbol profesional de la última década.
A partir del 2010, los investigadores han llevado a cabo más de 100 000 escuchas telefónicas de tramas de fraude a gran escala, directamente relacionadas con las apuestas deportivas organizadas por el mafioso de Singapur Dan Tan, de decenas de partidos de Serie B y LegaPro (3ª división), así como una treintena de partidos de Serie A.
Más de 100 personas han sido arrestadas o están siendo examinadas desde que comenzara la investigación. Entre ellas hay dirigentes del club, agentes, mafiosos y múltiples jugadores y entrenadores profesionales como Giuseppe Signori, jugador de la Selección italiana, sospechoso de formar parte del grupo mafioso Bologne, implicado en este caso.
Los jugadores Cristiano Doni y Stefano Mauri, antiguo capitán del Lazio de Roma, Domenico Criscito y Leonardo Bonucci, seleccionados por el equipo italiano para participar en la EURO 2012, así como el actual seleccionador de la selección nacional y antiguo entrenador de la Juventus de Turin, Antonio Conte, son sospechosos de haber tomado parte en los fraudes revelados.
Los anteriores ya han sido sancionados por las instancias deportivas italianas. Algunos, como Antonio Conte, Stefano Mauri, Cristiano Doni y Giuseppe Signori, junto con otras 30 personas, han sido enviados por el Fiscal de Cremona ante la justicia penal en febrero de 2015, por los actos de fraude deportivo y asociación mafiosa. El proceso se deberá llevar a cabo en la temporada 2015/2016.
La investigación ha revelado que el grupo mafioso de Singapur, con Dan Tan a la cabeza, está al frente de esta trama de fraude, gracias a las ramificaciones de las que dispone en Europa del Este, así como en Bolonia. La forma de actuar era la siguiente: varios jugadores, y en algunos casos también el entrenador del equipo, eran corrompidos para modificar el resultado de los encuentros, al mismo tiempo que las redes mafiosas apostaban en páginas webs asiáticas de apuestas deportivas.
Los investigadores han informado que las “tarifas” de corrupción eran de media las siguientes: 400.000€ por manipular el resultado de un partido de Serie A, 120.000€ por un partido de Serie B y 60.000€ por un partido de LegaPro. En el partido de Serie A Lecce/Lazio de Roma habrían sido necesarios 600.000€ para corromper a los jugadores y al entrenador, habiéndose embolsado la mafia unos 2 millones de euros. El caso está aún siendo seguido.
A principios de 2005, el árbitro alemán Robert Hoyzer fue sospechoso de llevar a cabo apuestas sobre el resultado de un partido de primera vuelta de la copa de futbol de Alemania. Se trataba de un partido que él mismo habría arbitrado y en el que muchas de las decisiones habrían sido dudosas.
H. Hoyzer dimitió de sus funciones como árbitro. La federación alemana de futbol, junto con la justicia alemana, abrió una investigación destinada a esclarecer si Hoyzer habría manipulado el resultado de otros encuentros.
Los resultados de la investigación mostraron que este árbitro había estado relacionado con la mafia croata, dirigida por Ante Sapina (ver el caso Bochum), organización que había llevado a cabo diversas apuestas de gran importancia en partidos arbitrados por M. Hoyzer.
M. Hoyzer reveló a los investigadores el nombre de otros árbitros que habrían sido de igual manera corrompidos por esta mafia, así como el de varios jugadores. En febrero de 2005, la justicia alemana anunció la interpelación de 19 sospechosos. Las pruebas encontradas implicaban, sólo durante el 2004, a 25 personas, de las cuales 14 eran jugadores y 3 árbitros. M. Hoyzer aceptó cooperar activamente en la investigación y facilitar información precisa a los investigadores.
Hoyzer fue suspendido de todas sus funciones de árbitro de futbol en Alemania. Gracias a su activa cooperación en la investigación, el árbitro pudo reducir su pena de 2 años a 5 meses de prisión. El presunto jefe de la red mafiosa, Ante Sapina, fue condenado a 2 años y 11 meses de prisión por este caso.
Se trata del caso de fraude más grande en relación con las apuestas deportivas: más de 300 partidos en varios países (Alemania, Turquía, Croacia, Austria, Hungría, Bosnia, Eslovenia, Suiza y Bélgica) habrían sido manipulados a todos los niveles de competición (campeonatos nacionales de divisiones inferiores, categorías jóvenes, partidos amistosos y competiciones internacionales como la Liga Europea y la Liga de Campeones).
El cerebro de la trama es el mafioso alemán de origen croata, Ante Sapina, que fue declarado culpable en mayo de 2011, junto a 4 de sus cómplices, a una pena de 5 años y medio de prisión. Esta pena fue añadida a la que ya se le había imputado por el caso Hoyzer.
Estos hechos de manipulación fueron descubiertos por casualidad a finales del 2008 cuando la policía alemana investigaba una red de prostitución y estupefacientes en Bochum. La policía constató que la organización criminal había puesto en marcha una red complementaria de corrupción deportiva, destinada a blanquear los ingresos de las actividades ilegales mediante el mercado de apuestas deportivas online.
Según indican las evidencias facilitadas por el fiscal de Bochum, la red criminal estaba perfectamente estructurada para manipular un gran número de partidos. Unos se encargaban de identificar los partidos clave, otros tenían por tarea adelantar el dinero para corromper a jugadores y árbitros; y otro grupo se encargaba de llevar a cabo las apuestas y recuperar las ganancias.
La mafia seleccionaba para cada encuentro uno o varios jugadores más vulnerables que otros (endeudados, amantes del juego, al final de su contrato, jóvenes, etc.), en uno o ambos equipos y uno o varios árbitros. Llegaron, incluso, a organizar ellos mismos partidos amistosos ficticios para aumentar las ganancias.
Una vez que el acercamiento se había llevado a cabo, la trama clasificaba los encuentros de 1 a 5 estrellas, en función del grado de fiabilidad de obtener los resultados deseados. Esta clasificación determinaba la cantidad de dinero que se invertiría en cada apuesta deportiva online.
En total, la mafia pagó 12 millones de euros para corromper a jugadores y árbitros. Ante Sapina ha declarado haber llegado a gastar una media de 1 millón de euros al mes durante este periodo para la manipulación de un partido a la semana. Durante este periodo, se apostaron decenas de millones de euros en los partidos en cuestión, lo que hace pensar que las ganancias para la mafia fueron considerables.
Zheyun Ye, hombre de negocios chino, estaría detrás de una importante trama de corrupción y manipulación de varios encuentros del campeonato belga de 1ª división, entre noviembre del 2004 y octubre del 2005, a través de la que habría obtenido una significativa cantidad de dinero en el mercado de apuestas deportivas.
La forma de actuar de Z. Ye fue la siguiente:
Al inicio de la temporada 2004/2005, Z. Ye comunicó al club de Sint-Trond su deseo de comprar el equipo, aceptado por los directivos del mismo. Ye procedió a continuación de la misma manera con otros 10 clubs belgas profesionales. Algunos de ellos atravesaban problemas financieros y acogieron favorablemente su propuesta, entre los que se encontraba el Lierse, La Louvière o el Mons.
Una vez adquirido el control de estos clubs, Ye, relacionado con la filial belga del grupo mafioso italiano Cosa Nostra, pudo tomar decisiones fundamentales de carácter deportivo (composición del equipo, alineamiento del equipo de reserva, etc.), así como corromper a varios jugadores y entrenadores (como Paul Put en el Lierse), con el fin de influir o manipular el resultado de los encuentros. Tras esto, Ye se valió de maniobras de intimidación y chantaje para obtener la respuesta deseada por parte de los deportistas.
En total, 19 partidos, 18 de los cuales eran de 1ª División, fueron manipulados, algunos de los ellos enfrentaron a dos de los clubs de Z.YE, lo que hizo aún más fácil la manipulación (por ejemplo el partido Saint-Trond/La Louvière el 29 de octubre del 2005.) Alrededor de 20 jugadores (la mayor parte del Lierse como Cliff Mardulier) y entrenadores habrían percibido individualmente sumas que irían desde los 7.000 a los 150.000 euros.
Al mismo tiempo se invirtieron importantes cantidades en webs asiáticas de apuestas deportivas, (fundamentalmente en Live Betting, gracias a la presencia de estudiantes chinos en las tribunas, que llamaban a un contacto en Asia para facilitar información sobre la evolución del partido antes de que fuese actualizada por las webs en cuestión) y en la página de intercambio de apuestas, Betfair.
Betfair sería quien constataría, durante la temporada 2005/2006, las apuestas anormalmente elevadas en los encuentros Saint-Trond/La Louvière y Cercle de Bruges/Saint-Trond, y por las que alertaría a las autoridades belgas. Z. Ye se dio inmediatamente a la fuga.
En 2004, el tribunal correccional de Bruselas condenó a Zheyun Ye a una pena de 5 años de prisión y a Paul Put, antiguo entrenador del Lierse y seleccionador de Burkina Faso, fue condenado a una pena de 2 años de prisión. En antiguo portero del Lierse, Cliff Mardulier, fue condenado por corrupción pasiva.
El 7 y 8 de diciembre del 2013, la policía inglesa arrestó a 6 personas como parte de la investigación de una trama de fraude deportivo en segunda división. Entre ellos, el delantero del Blackburn DJ Cmpbell, que pasó tres años de su carrera en tres clubs de Primera Liga.
En abril del 2015, 3 jugadores de 3ª división noruega han sido condenados por un tribunal de Oslo a penas de entre 6 y 8 meses de prisión por haber perdido de manera premeditada y bajo soborno al menos dos encuentros disputados en 2012. El club de estos jugadores habría alertado a las autoridades tras una derrota sospechosa 4-3 de su equipo, habiendo estado en un momento del partido a 3-0 a su favor. Se llevaron a cabo escuchas telefónicas que mostraban cómo estos dos jugadores habían hecho un pacto de corrupción con jugadores de apuestas suecos.
Tras ser convencido por su compañero de equipo del Essex Danish Kaneria, M. Westfield aceptó manipular las fases de juego de varios encuentros de Cricket. Westfield ha visto su carrera truncada, así como su sueño de jugar con el equipo nacional de Inglaterra arruinado tras haber sido declarado culpable y ser suspendido.
En febrero del 2013, la Federación china de futbol suspendió de por vida a 33 personas y sancionó a cientos de millones de dólares de multa a los clubs, en el escándalo más importante de manipulación de resultados deportivos ligado al mercado de apuestas que ha visto el país.
La federación ha expulsado de por vida a sus antiguos presidentes Nan Yong y Xie Yalong, en prisión por haber aceptado sobornos, y a Dalian Aerbin, presidente del club del este de China Xu Hong.
Por otro lado, dos clubs involucrados en un escándalo de manipulación de partidos en 2003, Tianjin Teda y Shanghai Shenhua, fueron sancionados a una multa de 160.000 dólares (en torno a 120.000 euros) y a una reducción de puntos para la temporada 2014. Shenhua, el club por el que pasó el francés Nicolas Anelka y que viene de dejar jugador de Costa de Marfil Didier Drogba, fue suspendido del título nacional que ganó en 2003.
En 1919, varios jugadores del equipo White Sox de Chicago optaron por perder de manera intencionada la final del campeonato de Beisbol tras recibir dinero por parte de un corredor de apuestas. 8 jugadores fueron suspendidos de por vida. Desde entonces el equipo pasó a ser conocido como los « Black Sox ».
En 2008, el árbitro de la NBA Tim Donaghy fue expulsado y condenado a 15 meses de prisión por haber influido en el resultado de múltiples partidos de este campeonato.
Tras estar en prisión, Tim Donaghy ha contado cómo llegó a manipular el resultado de varios encuentros a cambio de importantes sumas de dinero de la mafia. Tras haber apostado en partidos de la NBA junto a un amigo, este último dio la información a personas cercanas a la mafia, tras lo que dos hombres armados lo sacaron a la fuerza de su hotel en Filadelfia antes de un partido. Primero le pidieron que les revelara su pronóstico para los próximos partidos, y a continuación lo forzaron a asegurarse de que los resultados coincidieran con dichos pronósticos.
La mafia le hizo saber que si se negaba a seguir sus instrucciones, su mujer e hijos sufrirían los daños. Tim Donaghy se embolsaba 2.000 euros por pronóstico correcto. Según el FBI la mafia se habría embolsado varios millones de dólares en el mercado ilegal de apuestas deportivas.
En mayo de 2014, el “célebre” el mafioso deportivo de Singapur, Wilson Raj Perumal, declaró haber ganado miles de dólares australianos manipulando partidos del equipo de futbol australiano. El mafioso habría pagado a jugadores togoleses por conseguir tarjetas rojas en un partido contra Australia en 2008. En 2010, habría corrompido al árbitro del encuentro Australia/Egipto a través de un intermediario.
El jugador del club Collingwood Heath Shaw ha reconocido haber apostado 10 dólares a que su compañero de equipo y capitán Nick Maxwell, marcaría el primer gol del partido, sabiendo que el entrenador había decidido enviarlo a primera línea al principio del partido. Nick Maxwell reveló esta información a sus seres cercanos, quienes también llevaron a cabo apuestas en relación a este hecho sin que Maxwell lo supiera.
Heath Shaw fue suspendido por la federación australiana de futbol (AFL) durante 8 semanas por haber ignorado la reglamentación sobre apuestas, llevándolas a cabo en su propia competición y, particularmente en un partido en el que él mismo participaba. Nick Maxwell recibió una multa de 5.000 dólares por haberse saltado la prohibición de divulgar información fundamental sobre su equipo. La AFL ha decidido aplicar sanciones ejemplares para preservar la integridad de sus competiciones.
El jugador internacional de rugby a 13 Ryan Tandy fue suspendido de por vida de la Liga Nacional de Rugby y condenado a prisión con condicional por haber cometido dos faltas de manera voluntaria, durante el partido de los Bulldogs de North Queensland contra los Cowboys de Canterbury del 21 de agosto del 2010. Estas faltas permitieron que su oponente, los Cowboys, obtuviera dos penaltis.
La investigación ha demostrado que Tandy habría recibido 113.000 dólares australianos de los jugadores de apuestas ilegales, si los Cowboys no hubieran decidido jugar a mano uno de los penaltis. Tandy tenía deudas de juego que llegaban a los 75.000 dólares.
En febrero de 2015, Paolo Suarez (hermano de Luis Suarez del FC Barcelona), jugador del club guatemalteco Comunicaciones, está envuelto en un caso de fraude de partidos, según informa un periódico chileno.
Los investigadores han examinado dos casos, pero por el momento ninguno ha desembocado en proceso judicial. En 2012, Paolo Suárez, que jugaba entonces en el Isidro Metapán, habría recibido cerca de 15.000 euros por dejarse ganar en un partido que perdió 8-0. Por otra parte, su compañero de equipo y cuarto de Suarez afirma que rechazó una oferta de Suarez en la que éste le ofrecía 20.000 euros por jugar mal contra el Seattle Sounders.